martes, 4 de octubre de 2011

por K

Tengo el asunto manyado...
menos futbol, mas asado,
mas amor y adrenalina
que esta racha se termina

Franky no sabe de achique
de renuncias ni temores
es un equipo de amigos,
mas que de amigos, de amores!

Se enamoraron dos cincos,
les hace un mimo el enganche,
se apoyan dos defensores
la pelota no se manche...

Grita a lo loco su arquero,
estrena cien camisetas
mete ascenso y campeonato
y descubre nuevas metas...

si hay que pelear el descenso,
o corregir el camino
se junta a honrar un lechón
muy bien regado con vino

y asi recupera su fuerza,
toda su magia y su gracia
porque si no existe Frankenstein...
el futbol entra en desgracia!!!

Ernes

miércoles, 10 de agosto de 2011

lo de Frankenstein







El Doc era un gran tipo que a la caprichosa sabia tratar.

Fue del Castillo al Pueblo contandole a los pibes lo que pensaba armar.

Asi que una noche de rayos y centellas, contó lo de Frankenstein.

Y los pibes jugaron con Frankenstein, fumaron con Frankenstein,

drinkearon con Frankenstein.

Cuando les preguntaban por esa pelota . . . sabían que contestar.


Y yo que desde chico, como dijo Diego : - Quiero jugar un mundial !

Las vueltas de la vida, uno nunca sabe, donde va ir a patear !

Ahora que soy viejo, vivo muy contento . . . jugando con Frankenstein.

Jugando con Frankenstein, jugando con Frankenstein.

Si alguien me pregunta, que hacer con la pelota . . . yo ya se que contestar !


Quizas algún día, en esta Argentina todo vuelva a comenzar.

Se junten unos pibes que tengan mucho hambre . . . de fulbo y choripan !

Seria muy bonito que nada fuese en vano . . . y sepan lo de Frankenstein.

Sepan lo de Frankenstein, sepan lo de Frankenstein.

y si alguien les pregunta que hacer con la pelota . . . sepan que contestar !

martes, 11 de enero de 2011

El comandante Francis.

A la hora de pensar en el color y forma de nuestra camiseta para 2011, lo primero que no quería era partir de una visión plástica. Pues, venía tratando de sacarme justamente esa idea de la cabeza. Más bien, buscaba una idea de orden más dramática como concepto, alineada, supongo, con nuestras realidades, como una metáfora de nuestros Espacios.
Barra,
Vestuario, Barrio, Esquina, Centro o Corner. Puntín. . . Orsai !
Luego reconocí que el concepto que buscaba, ya lo había elaborado tiempo atrás. Todo vuelve. No se va nunca. Solo perdemos el Tiempo.

A comienzos de 2010, trabajé para un proyecto audiovisual con gente amiga, entre los que conocí a un muchacho que me llamó la atención porque siempre llevaba puesta una gorrita. Tipo cap, muy lindo, co
nfeccionado integramente en gabardina de esas que se usan para ropa miliciana o de trabajo. De entrada no, pero luego con el transcurso de los días y objeto de mi curiosidad, me daba la sensación de que pertenecía a algún ejercito. Al frente sobre la visera, tenía cocida una estrella roja de cinco puntas color rojo Sangre. La gorra era de color verde pasto.
Debo agregar que, pibe-gorra por estilo, fundian como el Sol-Do de guitarra en un fogón en Bariloche. Él trabajaba en el area de Producción, era joven de veintipico, piel trigueña y pelo castaño. Usaba barba no muy larga. Ubicadisimo, jamás se equivocó. Ante sus errores, retrocedía siempre, soy testigo. El tipo era un justiciero, equilibrado, a veces por joven era equilibrista, pero siempre volvía a comenzar. La gorra nunca se la sacó.


Tiempo despues, investigando para crear la divisa que nos interesa, descubrí que aquella gorra era nada menos que de la famosa gorra de Fidel.
Pues, yo en el trajin del trabajo, nunca había no
tado la banderita cubana bordada sobre el lateral izquierdo.
Esta gorra, es una pieza indumentaria matríz de la moda mundial e icono de la Libertad de America. Tambien una parte inobjetable del uniforme del ejercito revolucionario cubano, vestido por miles de hombres y mujeres, que como nosotros, luchan convencidos de que los ideales existen.

Entonces hoy, cargo mi fusil y disparo este aporte, cuyo blanco es la Realidad que nos toca vivir juntos y para Siempre, por los terrenos fértiles de la Fidelidad.